"Pensaron que con el agua íbamos a desaparecer"

Por Daniel Acosta y Enzo Vicentin

     Una pieza de reducidas dimensiones ubicada en Mendoza y San Lorenzo (local de la Federación Tierra y Vivienda) sirvió de espacio para la charla que el Mango del Hacha sostuvo con Juan Dávalos. Una foto con la cara de Evita, afiches de la CTA, una bandera argentina colgada del balcón y algunos dibujos que los niños les dedicaron a estos piqueteros parecerían mostrar a priori una síntesis de su esencia. La entrevista reflejaría mucho de lo que las paredes nos decían antes de empezar.

     ¿Cuando empezaron hace 10 años, se denominaban como piqueteros o eran otra cosa?

     No, o sea, en realidad nuestra organización comenzó en el barrio por una necesidad: la desaparición día a día de la fuente de trabajo, con lo cual nos unificamos con los vecinos y se formó el movimiento de desocupados Vecinos en Lucha. Luego nos alineamos a un movimiento grande nacional como la Federación Tierra y Vivienda, a la cual hoy pertenecemos.

     ¿Cuántas personas pertenecen a la Federación Tierra y Vivienda en Santa Fe?

     Estamos alrededor de los 10.000 compañeros.

     ¿Y viven en distintos barrios o están anclados solamente en Santa Rosa de Lima?

     No, no. En distintos barrios y en distintos lugares de la provincia.

     El oeste de la ciudad, en donde estaban ustedes, se vio muy afectado por la inundación. ¿Cómo impactó esta tragedia? ¿Qué pasó con los compañeros?

     Obviamente nosotros venimos hace rato con nuestro movimiento haciendo un trabajo muy importante en el área social, por causa de la falta de representatividad de nuestros dirigentes políticos, tanto en los barrios como a nivel municipal y provincial. Y esto tiene mucho que ver con este desastre que hemos tenido que vivir en distintos barrios. Con los discursos que hoy nosotros analizamos parece ser que el gran estorbo somos las organizaciones sociales que hoy estamos organizadas. Pensaron que el agua nos iba a hacer desaparecer a todos los que hoy somos un estorbo ante unas políticas nefastas, que vienen hace tiempo. Pero bueno, demostramos hoy que estamos de pie, vivos, organizados, y seguimos haciendo los reclamos que nos corresponde. En todo este daño que se ha hecho en los distintos barrios hay responsabilidad política de los gobiernos que hoy están de turno, tanto el provincial como el municipal. Ellos tendrán que pagar este daño, no únicamente los materiales, sino los emocionales, los físicos, es decir todo lo que tiene que ver con esto. Las actitudes de este gobierno son criminales; acá hay un grado de criminalidad que se ve en cada una de las personas que hoy sufre y deambula en las calles.

     ¿Hubo ayuda de la FTV a nivel nacional?

     Nuestro movimiento obviamente ha apoyado a nivel nacional a la provincia de Santa Fe, han venido de distintas provincias donde se han hecho mesas nacionales de la FTV, con mucho apoyo: alimentos, ropa, zapatillas, herramientas para construir.

     Con lo que dijiste anteriormente vos partís de la base de considerar responsable de esta catástrofe al gobierno. Esto no fue un problema únicamente natural.

     No.

     Es decir que se podría haber previsto.

     Obvio. Nuestro movimiento en alguna ocasión presentó petitorios y se hizo un corte de ruta en advertencia de lo que iba a suceder. Y si la defensa falló es porque alguien dejó que falle, porque alguien es responsable de esto. El que tenía que preverlo, no lo previó. O sea, así como se construyó la costanera, o el puente colgante, yo creo que también la zona oeste era prioridad y la plata tenía que ir ahí.

     Y con respecto a la reconstrucción de toda la ciudad, ya sea para hacer defensas, puentes o canales: ¿a vos te parece que el responsable de esta situación vuelva a tomar en sus manos la reconstrucción?

     Esperemos que los mismos culpables sean los que reparen el daño que hicieron. La reconstrucción se tiene que discutir y nosotros queremos participar en esa mesa. Queremos saber, porque hasta ahora las donaciones que han venido y que son fundamentales como el colchón, la cobija, la zapatilla, la comida de todos los días, pasa por las manos del gobierno, que por otro lado contrata a empresas privadas que están cobrando una fortuna la porción de comida. Nosotros repartimos todos los días 5000 porciones y no le cobramos un peso a nadie. Esto tiene que ver con la administración, con la atención de la cual son responsables los mismos que causaron la crisis. Muchos compañeros que perdieron su hogar hoy están en casas desocupadas, deshabitadas, donde se han refugiado, y es lamentable porque este gobierno no ha tomado firmeza sobre la protección de los ciudadanos sino que han actuado jueces junto con la Gendarmería en desalojos de esas casas. Esto no es humano. Seguimos viviendo en una dictadura, y esto impacta mucho y nos preocupa porque realmente vemos que todavía siguen estando los que fueron y son artífices de la exclusión social en Argentina.

     ¿Tuvieron en el movimiento algún llamado del gobierno provincial para charlar con ustedes acerca de esto?

     Nosotros nos reunimos con Reutemann a través de una gestión que hicieron Duhalde y Luis D'Elia. Fuimos a Casa de Gobierno y ofrecimos nuestras organizaciones para poder ayudar en la emergencia. Reutemann no se sintió cómodo, se sintió un poco molesto.

     Por la participación de ustedes.

     Claro, nosotros fuimos a ofrecer nuestras organizaciones para ayudar en la emergencia, y para ser administradores en el reparto de las donaciones, en la distribución. Estaba muy enojado el hombre. Y no nos ayudó con nada.

     ¿Cómo paliaron entonces esa negativa oficial?

     Y nosotros a través de nuestra pobreza, de nuestra humildad, tratamos de comprar unas ollas, y ayudamos a los distintos compañeros para que coman todos los días. Esta es una función que estamos haciendo diariamente. La otra cuestión es que en el día de la desesperación (Martes 29) fuimos al Náutico Sur y trajimos dos lanchas porque realmente las necesitábamos; la emergencia no llegaba y en la desesperación nosotros veíamos que los vecinos se ahogaban, por eso fuimos a buscar dos lanchas al Náutico y nos largamos a salvar familias. Yo salvé más de 10 familias en ese momento con esas lanchas. Por sacar esas dos lanchas se me abrió una causa judicial y se me pintó los dedos; mi hijo y otro compañero quedaron presos por esta situación. Esto es una de las cosas que también nos preocupa porque nosotros pusimos todo lo que teníamos para poder salvar vidas y ayudar.

     Y los terminaron procesando.

     Y nos terminaron procesando por esta situación (risas). Y la otra es el reparto de las donaciones, en el que los punteros políticos hicieron su negocio. Hoy, fijate vos, han premiado a las vecinales que nunca hicieron nada. ¿Dónde están esas instituciones que son del barrio? Si esas instituciones hubiesen funcionado en su momento los movimientos sociales no existirían; entonces esta es la pregunta que queda junto con la bronca: ¿por qué la ayuda siempre a los punteros políticos?

     En el caso de la distribución de la mercadería: ¿Cómo vieron ustedes en el movimiento el papel del Ejército, que vino al principio y luego reemplazó a la estructura del Estado en toda la distribución?

     Esto pasa porque hay un Estado ausente, un gobierno incapaz, entonces recurre al Ejército, que tiene una doctrina generalmente disciplinaria dentro del pueblo. O sea, acá se da una orden y se cumple, y si no palo y a la bolsa. Esto es todavía la falta de madurez dentro de los dirigentes políticos que hoy representan al pueblo argentino. O sea, todavía no han sido representantes legítimos. Hubo algunos funcionarios que ni siquiera se mojaron los pies.

     ¿Ustedes ven con alarma el hecho de que se dice que algunos barrios deben ser reubicados en otra parte? ¿Discutieron eso en el movimiento?

     Se está discutiendo. Creemos que la reconstrucción de nuestro barrio en su lugar actual, en donde hay 30.000 habitantes, está bien. Ha llovido muchas veces y nunca se ha inundado como esta vez, entonces con lo que ocurrió… ¿cuál es el análisis que uno hace? Si hay una inversión para reconstruir nuestro barrio, y luego llueven 150 o 200 milímetros ¿hay garantía de que el agua no vuelva a entrar? ¿Quién se va a hacer cargo?

     ¿A vos no te parece necesario que sobre la reconstrucción se consulte a los mismos afectados del barrio para decidir?

     Se los va a tener que consultar, porque hay vecinos que son propietarios. Yo creo que la discusión de todo lo que quieran hacer merece un análisis de parte de todos los que son propietarios.

     ¿Qué acciones piensan hacer para reclamar? Algunos organismos ya han presentado demandas legales contra el gobierno. ¿Han tenido alguna actitud de ese tipo?

     Nosotros vamos a salir a las calles, todas las semanas, como venimos saliendo. Yo creo que las actitudes de este gobierno provincial y de este intendente, son soberbias, son criminales. Ambos son culpables y tendrán que pagar. Tendrán que ir presos, la justicia tiene que meterlos presos porque lo que hicieron no tiene perdón: mataron mucha gente, muchos niños, muchos animales, destruyeron muchas casas. Son culpables.

     Y el camino para lograr eso es presionar en las calles, con las movilizaciones.

     Lógico, con las movilizaciones.

     Me parece que lo que ustedes plantean es un camino distinto al de las demandas legales, evidentemente es otra cosa, es presionar en las calles, hecho que muchos organismos no suelen hacer.

     Porque la razón es que acá siempre se hacen oídos sordos, acá la Justicia siempre votó a favor de este gobierno, y sostuvo a este gobierno. La Iglesia, la Legislatura, el Poder Judicial…es todo un armado estratégico que tienen. Pero esto no viene de ahora, por ejemplo los 7 muertos de Rosario nadie los pagó; o lo de Storni por poner otro caso, tampoco fue preso.

     Cambiando de tema, ahora con la llegada de Kirchner al gobierno, ¿se abre una expectativa en el movimiento piquetero?

     Este gobierno es un gobierno de transición, un gobierno débil. Un gobierno en el que las organizaciones sociales van a tener que ser muy inteligentes en este plazo porque acá hay que defender la democracia. Hay que lograr que llegue un gobierno que sea popular y yo confío en que Kirchner sea un gobierno al que hay que sostener, para cuidar la democracia.

     ¿Pensás que dentro de las opciones que había Kirchner es lo mejor, o el menos peor de los peores?

     Puede ser uno de los mejores, que tenga más acercamiento con el campo popular.

     ¿Y al resto de los candidatos cómo los veías? Por ejemplo Carrió, o Rodríguez Saá.

     Y bueno, Carrió puede llegar a ser otra que esta más cercana al pueblo, pero los otros… son de la misma banda de la escuela de los que nos llevaron a esto.

     Sobre Kirchner y el nuevo gobierno, específicamente sobre los planes Jefes y Jefas de Hogar: ¿ustedes tienen expectativa en que se aumenten los 150 pesos de los planes o ven que esto no va a pasar y más bien este gobierno va a recortarlos?

     En primer lugar, yo creo que los planes no tienen que existir. Hay que crear fuentes de trabajo, porque la Argentina con los planes sociales se empobrece más. Los planes no enseñan, no educan, sino que son asistencialismo puro que hace dormir al compañero, y no produce. Nuestra gente no tiene un destino de libertad sino de condena, y esto es grave porque es lo que nos hace perder identidad, nos hace perder la dignidad, nos hace perder a todos los que son responsables de su propia familia, porque se los humilla.

     ¿Hay un límite para los planes sociales? ¿Ustedes se "bancan" más años de planes o van a empezar a pedir cada vez con más fuerza el trabajo genuino?

     Nuestro movimiento ha tomado ahora un camino que es el de elaborar las tierras en asentamientos, y ya tenemos uno pasando Rincón. Pensamos hacer granjas comunitarias donde cada una de las familias pueda trabajar y vivir de lo que produce. En eso estamos concentrando nuestros esfuerzos.

     Mucha gente de los que reciben un plan Trabajar se quejan porque de los 150 pesos solo reciben 130 o 140 pesos. ¿Es cierto que algunos dirigentes se quedan con una parte de los planes?

     Hay tantas denuncias, pero la Justicia nunca ha podido comprobarlas. Nuestra organización tiene una cuota solidaria, que no se le exige a nadie. Lo hacemos para ayudar a nuestros compañeros y para llevar a cabo una administración de las actividades del movimiento. Ahora, volviendo a las denuncias, ese tema siempre ha salido pero los que lo toman para generar polémica son los medios de comunicación; el tema de la justicia es que tendría que investigar esto más a fondo y que los culpables se den a conocer. Pero cuidado porque esto no sólo ocurre en las organizaciones piqueteras, pasa también en las líneas políticas, porque en el Estado hay ñoquis que no van a trabajar nunca y cobran una fortuna ¿eh?

     Por ahí se ve en diarios a movimientos piqueteros que reciben planes y los utilizan para crear panaderías, dispensarios, etc. y lo que sobra de esos planes lo distribuyen organizada y democráticamente entre ellos. ¿Cómo es la distribución entre ustedes?

     Nosotros tenemos organizaciones en distintos barrios. Ese barrio recibe tantos planes y ahí desarrolla huertas comunitarias, hornos, carpintería, costurero, es decir un desarrollo comunitario. También intentamos con pequeñas y medianas empresas, para adquirir un desarrollo de la cultura del trabajo a largo plazo. En la necesidad y en el momento de la crisis argentina en el plano laboral, con el plan Trabajar nosotros tratamos de abrirle la cabeza al compañero para que entienda que ese plan no es la solución sino un paliativo, una gota de agua en el mar. Y es eso lo que tiene que despertar: tenemos que tratar de que en la Argentina se abran las perspectivas de que halla fuentes de trabajo genuinas.

     Esta desgracia que nos tocó a todos acá en Santa Fe, a mi me pareció que era una oportunidad como para que surgiera un movimiento sólido, unificado, formado fundamentalmente por los bloques piqueteros, los trabajadores desocupados y también los que todavía trabajan; era un momento propicio para unificarse a raíz de la solidaridad espontánea que surgió de la gente. ¿Qué opinás al respecto?

     Dos cosas. La primera es que este plan político ha desmantelado y vaciado de las cabezas de de la gente a la solidaridad. La otra, en la Argentina vienen cambios históricos y políticos. Ahora depende del sector trabajador, qué preparación tiene para que estos cambios se den, porque acá el cambio tiene que ser de abajo para arriba, no de arriba para abajo. Esta es la visión que tenemos nosotros; de acuerdo a cómo esté preparada cada organización, sin desmerecer ninguna ideología ni ningún movimiento, el pensamiento se tiene que centrar en un solo objetivo: que la política sea del pueblo popular.

     En ese punto, ¿ustedes desde la FTV plantean reemplazar en los cargos políticos a los que están ahora o piensan que no hay que entrar en la estructura estatal?

     Hay que entrar en la estructura estatal, hay que cambiar. Tiene que haber cambio de hombres. Nuestro movimiento viene hace rato en la capacitación de hombres nuevos de la sociedad. Y cuando hablamos del hombre nuevo hablamos de un nuevo pensamiento, de los principios, y de ser más nacionalistas para defender nuestro territorio.

     ¿Y están pensando en presentarse para las elecciones provinciales o municipales o ven que todavía no es el momento?

     Vamos a tener que decidirlo en algún momento. Tenemos que participar porque si no siempre quedamos afuera tocando el bombo mientras que los otros cierran la puerta y negocian a su favor.

     Hay gente que desde afuera del movimiento acusa a los piqueteros de que a la unidad y a la coherencia del grupo se las dan los planes, y no unas ideas políticas. O sea, que los dirigentes piqueteros utilizan a los planes para "extorsionar" a los compañeros y que vayan a las marchas, sin estar convencidos de las ideas que se llevan adelante. ¿Cómo ves esa acusación?

     Por ejemplo quién dice eso.

     Digamos que algunos partidos de izquierda que no se enrolan con ustedes, o la "gente del centro".

     Nuestra organización es abierta y democrática, nosotros tenemos debate, hablamos sobre el momento transitorio, de los planes, también del marco político tanto nacional como local. Tenemos que aprender a votar, aprender qué es la política, tenemos que tratar de que nuestra Argentina sea soberana, democrática y con trabajo. Y me parece que esa es la discusión que nos tenemos que dar todos, y de la cual nos tienen que quedar principios claros a cada uno, en forma individual, es decir un aprendizaje independiente. A nadie lo tienen que obligar, por ejemplo nuestro movimiento no es así.

     ¿Cómo toman resoluciones en el movimiento?

     A través de asambleas. Nosotros tenemos los días lunes reuniones con 120 delegados de distintos barrios y distintas provincias, en donde hay un debate abierto y luego se vota democráticamente. De las distintas formas de pensar, incluso habiendo pertenecido a partidos diferentes, saldrán los hombres que realmente puedan ser representantes que se comprometan con el movimiento.

     Volviendo a la situación santafesina, ahora viene una situación muy trágica, que es el hecho de sacar a los evacuados de las escuelas y meterlos en carpas o galpones. ¿Qué opinión tenés? ¿En qué va a desencadenar todo esto?

     No va a terminar bien, porque muchos de los compañeros y vecinos que han sufrido y han padecido, están muy sensibles. Esta es la actitud de un gobierno que realmente no es humano, son tipos que no tienen corazón ni tampoco les interesa la vida de los que sufren. Nosotros, al ver que no hay una solución inmediata para los que nos quedamos sin casa, sostenemos que nadie tiene que ser desalojado de ningún lado. Porque es cierto que tiene que haber una ubicación de emergencia, pero ya pasamos un mes y este gobierno no toma resoluciones ahora. Acá se trata de familias, con chicos, con ancianos, o sea ¿cómo va a hacer? Porque hoy en Santa Fe sobran 120.000 personas que han sido afectadas por esta inundación, que están en el centro, y eso es lo que molesta, ¡eso es lo que molesta! Eso es lo que preocupa, pero no hay solución.

     Como solución el gobierno a través del ministro Germano plantea una salida: que para el 2 de Junio comienzan las clases, y para eso tiene que desalojar las escuelas en el transcurso de estos días para ponerlas en condiciones y así empezar.

     Si a nuestros compañeros los desalojan, vamos a ir a la Municipalidad y a la Casa de Gobierno, puede ser que de ahí no nos desalojen. Este es el planteo que tenemos nosotros. Si no hay una ubicación que valga la pena…vamos a protestar ante cualquier medida.

     Sobre este tema, hay un problema que yo estoy viendo es que al desalojarlos de las escuelas del centro, los chicos que van a esas escuelas van a tener clases y los más afectados no van a poder ir a clases. ¿No creés necesario pelear entre todos los sectores para que den educación a todos los chicos al mismo tiempo?

     Lo estamos haciendo. Lo hicimos en la movilización con todo el Comité de Solidaridad (día miércoles 21 de Mayo) integrado por distintas instituciones, y después presentamos un petitorio al ministro de Gobierno. Yo creo que eso es una advertencia.

     Esto de la inundación a la FTV: ¿la fortalece, la debilita, la deja tal cual era antes? Digo a nivel de los compañeros.

     A los dirigentes de la FTV les tienen que cortar la cabeza para que dejen de existir. Hasta ahora, no hubo quien las pueda cortar. Nosotros estamos dispuestos a llevar nuestro movimiento hasta las últimas consecuencias y a defender nuestros territorios como corresponde, sea quien sea: la justicia, el gobierno o quien sea. Tenemos consagradas nuestras vidas en defender el movimiento, porque yo creo que nuestra organización ha dado la cara mucho más que los gobernantes, ha puesto el pecho a un montón de cosas en reclamos que han sido concretos, y creo que no estuvimos equivocados. Advertimos el tema de la falta de trabajo, la violencia en los barrios, falta de iluminación, la inseguridad, salud, y ahora la inundación… ¿y? Hay una fortaleza muy grande de nuestros dirigentes dentro de los distintos barrios. Están al pie del cañón. Lo mismo ocurre a nivel de base.