Crónicas Curturales

Los zombis son esos tipos con la mirada perdida, desprovistos de iniciativa propia, sin capacidad para discernir o realizar operaciones complejas, incapaces de rebelarse ante un estado de injusticia que les niega su derecho más primario, esto es, descansar en paz.

Zombis

por Maytland Goyeneche

El género de terror, ya sea en películas, libros, comics o figuritas coleccionables suele alimentarse de dos vertientes, a saber:

1. la necesidad de hacerte asustar por cualquier cosa, y
2. utilizar el tema como metáfora social.

En el apartado 2 tenemos muchos ejemplos y podríamos ajustar a esta premisa a casi toda la producción terrorífica que se haya hecho. Independientemente de que el autor haya pensado en esto o no.

Así habremos escuchado alguna vez sobre el carácter vampírico de las relaciones entre naciones poderosas y naciones débiles o en las relaciones de pareja, como en el caso de Dean Martin y Jerry Lewis.

También el eterno conflicto del hombre y la ciencia, ahora que están de moda los clones, no ha encontrado mejor espacio de reflexión que en las obras de ciencia ficción, incluidos el Dr. Frankenstein y su patético y resentido monstruo.

Los zombis también saben algo de los simbolismos, piensa en la caracterización inicial (la que esta arriba del titulo) sobre estos muertitos no te recuerdan a alguien. Si no se te ocurre nada invítote a trasladarte al centro de la cuidad en una hora pico (o sea cuando hay más gente) y mirar a los caminantes a los ojos. Si tu respuesta sigue siendo negativa, procura entonces que cuando intentes suicidarte se destruya totalmente tu cerebro, porque sino es muy posible que sigas caminando.

Monstruos

Pero los zombis no son como los otros monstruos. El monstruoso Mr. Jeckyll tenia al atormentado y benévolo Dr. Hyde (atormentado y benévolo, teníamos que acudir a la literatura fantástica para encontrar un Dr, con estas particularidades) para servirle de contrapunto. De más está hablar de la indefensión y soledad del monstruo de Franki y si bien Drácula tiene hábitos bebestibles non sanctus su figura tiene un halo romántico, seductor y signado por la fatalidad que lo hace un tanto bellamente irresistible. Tal vez la Momia y el Hombre Lobo no sean tan ricos en matices, pero depende de lo que hagan los artistas que les toquen en suerte que sean interesantes o una simple bazofia. El Monstruo de la Laguna Verde no ha podido salir de su clasificación de "mostró de goma", no podemos negar que tiene un potencial más que interesante para desarrollar la temática hombre-naturaleza, y por ahí andan también los dinosaurios y Godzilla, este entrando de lleno en el problema ecológico, aun que más no sea como excusa para destruir maquetas. El hombre invisible no es ningún monstruo (de hecho, es un hombre, invisible) pero sí empecinamiento en ir contra la naturaleza lo convierte en un ser monstruoso, aunque si nos ponemos en exquisitos, solo se convierte en un megalómano científico que quiere conquistar el mundo.

Zombis vudú

Los zombis no son tan sofisticados, hunden sus raíces en las prácticas vudús de los países del caribe siendo Haití el más mediático de ellos. En primer lugar estos tipos no son muy monstruos que digamos, solo una especie de robot que un hechicero manipulaba para poder tener mano de obra barata a la que no tuviera que alimentar ni proteger del clima hostil. Eso sí, un robot bastante desagradable que olía muy feo y las moscas le rondaban cada vez que iba al baño, ya que se trataba de cadáveres que por medio de artes mágicas se traían a la vida con oscuros propósitos.

En 1932 Victor Halperin filmó "White Zombie" una peli de terror con Bela Lugosi con este tipo de zombis.

Y en 1943 Jacques Tourneur se despacha con "I walked with a zombie" (Yo anduve con un Zombie) una película clase B sólo en lo que respecta a presupuesto y título, ya que el felm transpira talento por los cuatro costados. Y si tienes oportunidad de verla no le esquives el bulto que es una de las 10 mejores películas de todos los tiempos. Pero estos tampoco son los zombis que nos ocupan.

George Romero hace su ópera prima, es decir, filma su primera película, en 1968, "Night of the Living Dead", también conocida como "La noche de los muertos vivientes". Ya desde el título nos damos cuenta de que no es una peli que aspire a ganar el Oscar ni mucho menos. Auténtico clase b, desde el presupuesto, los efectos especiales, los actores y la filiación temática (cosa esta última que no se muy bien que quiere decir pero suena muy bien en una nota que hable sobre zombis).

Clase "B"

El cine de clase "B" es tal en cuanto existe uno de clase "A", es decir, la "B" sería de segunda clase, inferior, aunque esto solo se aplica en términos de recursos económicos. Roger Corman es conocido como el rey de las producciones clase "B", por su manera de producir películas, cual se tratara de hacer chorizos. Con un presupuesto mínimo llamaba a un equipo de realizadores (actores, directores, vestuaristas, camarógrafos y un poco más) para hacer una película aprovechando que había conseguido los decorados de una película de época y a filmar se ha dicho, en un par de semanas (a veces hasta cuatro días bastaban) ya tenían terminada la película que proporcionalmente al costo de una producción clase "A" daría pringües ganancias (a propósito, ¿qué significa pringüe?). Pero acá no se terminan las diferencias. Las producciones de clase "B" gozan de un plus extra, la independencia de los grandes capitales. Al no haber TANTO dinero en juego los realizadores se pueden tomar ciertas libertades que una película de "primera categoría" jamás se podría dar. Y aquí entran dos vertientes a saber: las libertades que apuntan a recaudar más dinero (fácil ecuación: sexo y violencia) y las libertades creativas, las que se inscriben en el aspecto ideológico, tanto si van para la izquierda como si van para la derecha. No se puede hacer una superproducción tipo Spiderman cual si se tratara de "El vengador anónimo", ejemplo por antonomasia del discurso fascista. Bueno, en realidad ahora sí se puede hacer, pero eso lo veremos en la próxima clase intitulada "Productos curturales e ideología" que estoy próximo a escribir. Apuntemos entonces al discurso de izquierda: no se puede filmar una película tipo ""El señor de los anillos" con los millones de dólares que cuesta con el mensaje "destruyamos la sociedad de consumo". Bueno, en ciertas circunstancias se ha hecho el intento (tal vez "El club de la pelea") pero convengamos que es mas bien imposible que suceda.

En el caso de "La noche de los muertos vivientes" tenemos algunos datos que nos permite ubicarla en el estricto clase "B" a saber, fue financiada por más de treinta inversores de distinta índole que iban agregándose a la producción conforme la película iba siendo montada, los primeros diez inversores fueron a su vez el equipo de producción, por ejemplo, dos de ellos, también actores del film, se encargaron de los maquillajes, la selección de la música de archivo y los efectos de sonido, entre otras labores. Kyra Schon, quien hace de hija de los dueños de casa era en realidad hija de Karl Hardman, el dueño de casa que también era uno de los productores arriba mencionados, e hizo doble papel como el cadáver del piso de arriba. No podían rodar más de seis tomas por escena, y a mitad de la película Romero acabó haciendo sólo dos o incluso una toma, con los riesgos que eso implica si se hubiera perdido algo (ya que la casa iba a ser destruida, y no podrían volver allí). Para mantener la continuidad en las ventanas tapiadas tenían que estar siempre en la misma posición, así que en los lados opuestos estaban marcados con la indicación de dónde debían ir y en muchos momentos se poden ver estos apuntes y numeración. Pero más allá de las limitaciones presupuestarias tenemos también el componente más importante, este es el conceptual, el que le da entidad a la película en cuanto tal, una historia donde unos cadáveres todo podridos persiguen a la gente para comérsela. Los personajes principales que al principio parecen ser dos hermosos ejemplares rubios de norteamericanos Wasp decantan enseguida por un… negro. Piensen, 1968, a pesar de las revueltas sociales por los derechos civiles y el movimiento underground que empezaba a asomar el proyecto de George Romero no era precisamente circunscribirse al gueto de los iluminados de la resistencia contracultural, sino convertirse en director de cine y hacer películas que la gente viera. Esto en el circuito de salas de cine, allí donde se estrenan las películas que te permiten recaudar dinero para poder seguir haciendo películas. Aunque, debemos reconocerlo, con una cierta mirada personal que, quiéralo o no, lo ubicaba al margen. Aún hoy, casi treinta años después es imposible encontrar una superproducción donde el protagonista negro termine quedándose con la protagonista blanca.

Bueno, el negro no se quedaba con la protagonista blanca, pero esa es otra historia.

El zombi

La cosa es que esta película daría carta de nacimiento a un nuevo mostro del imaginario popular, el zombi, el muerto vivo que persigue gente viva para comérsela. En algunas versiones buscan cerebros ("cerebrossss, cerebrossss" se los escucha balbucear), pero eso es solo una libertad poética para hacer más salvajes a los zombis.

En "La noche de los muertos vivientes" no hay explicación alguna sobre el origen del fenómeno. Solo que un día los muertos resultan no estar tan muertos y se levantan para perseguir a la gente con intenciones gastronómicas. Apenas algunas breves explicaciones por los medios cuando la cosa estaba empezando que no conforman a nadie (como siempre, las explicaciones del gobierno no conforman a nadie).

¿Como se mata a un zombie? Solo destruyéndole el cerebro.

¿Qué hace un zombi en su tiempo libre? Solo camina por ahí a la espera de que aparezca un alimento. Por momentos se los puede ver parados, quietos mirando al vacío y después reaccionan y mecánicamente se ponen a caminar con su paso arrastrado.

Y después las cosas son como vienen, los cadáveres vivientes lo invaden todo y los humanos vivos tienen que actuar en consecuencia, retirándose a donde estén lejos, donde se puedan refugiar.

En la primera película sobre estos zombis, "La noche de los muertos vivientes" la acción se limita a mostrar en primer lugar el ataque de un zombie solitario a una pareja de hermanos y después como estos van huyendo a refugiarse en una casa donde hay otros refugiados y lo que pasa luego entre estos. Pero algo queda claro, el peligro no está afuera. Allí está lo que te come, adentro, junto a vos, está lo jodido. ¿Cómo hacer para construir una sociedad en armonía cuando en cualquier momento te pueden tirar a la calle para asegurarse la supervivencia? En realidad toda la zaga zombie de Romero se trata de esto. La falta de un estado que te asegure la supervivencia en situación de crisis y la descomposición moral de los que quedan vivos, o sea, los que quedan incluídos en la sociedad de los que se salvan.

Saga zombi

Hasta la fecha (2007) Romero tiene realizadas cinco películas oficiales de los zombis. "Night of the Living Dead" (1968), "Dawn of the Dead" (1978), también conocida como Zombie, es la del shoping, "Day of the Dead" (1985) donde los sobrevivientes se refugian en una base militar subterránea y donde se ve más que en las otras el carácter horrible de los que están vivos, Land of the Dead (2005), 20 años después la sociedad se está acomodando, pero los zombis también están acomodándose, y tenemos una que todavía no se estrenó, "Diary of the Dead" que estaría ambientada paralelamente a la primera película y parece que se explicaría el origen, no lo sabemos aún, y hay además en carpeta realizar "World Of The Dead", que cerraría la zaga. Igual que "Star wars", pero en tono gore.

Gore

Cine Gore o Splatter es un tipo de películas que se caracteriza por mostrar demasiado explícitamente escenas de violencia. Gore significa literalmente sangre en inglés, y splatter (término adjudicado a Romero) es algo así como salpicar o rociar, sin sustantivo alguno, aunque hablando de películas con muertos vivos lo primero que viene a la mente no es una salpicadura de barro precisamente. Este énfasis en efectos especiales asquerosos y sangre excesiva comienza en los años 1960 con las películas de Herschell Gordon Lewis, como por ejemplo Blood Feast (1963).

Algunas veces el gore es tan excesivo que la película se convierte en una comedia, es el caso de "Braindead" (1987) del ahora reconocido Peter Jackson (El Señor de los Anillos). Splatstick es el término utilizado para describir a este tipo de películas. Comedias que incluyen generosas dosis de sangre y vísceras. Algunos ejemplos de estas películas son Bad Taste (1987) y Dead Alive (1992) del Peter Jackson.

Escenas splatter o gore también pueden ser vistas en películas de otro género, como "1942" de Ridley Scott, "Kill Bill" de Quentin Tarantino, "La Pasión de Cristo" de Mel Gibson o "Saló o los 120 días de Sodoma" de Pier Paolo Pasolini.

Zombi, algo poco serio

En los círculos ilustrados el zombi no es algo a tener en cuenta, solo un fenómeno más de la cultura de masas con su gusto por lo mórbido y jamás se les ocurriría que se pueda hacer algo serio con ello. Curiosamente habrán pensado lo mismo de Drácula o de Frankenstein, pero no importa, esto solo es hasta que algún catedrático decida que sí son valiosos para el estudio de la cultura y que se puede disfrutar de ellos, tal vez Zizek lo haya hecho, pero hace falta alguien menos zurdo, Humberto Ecco sería el indicado.

De todas maneras uno se pregunta porqué estos personajes deberán ser reconocidaos por nadie, apenas se trata de productos curturales con una cierta óptica que seguramente no a todos les apasiona, incluso a muchos les desagrada, claro, no es lo mismo que "El arca rusa", película que además te da status de persona culta y refinada. O una Ken Loach, que además te da status de revolucionario.

Me quedan algunas cosas en el tintero (¿cómo debería decir ahora que uno escribe con computadora?), pero la cosa se hizo muy larga, así que dejaré para próximas clases asuntos tales como:

• en qué se parecen los zombis a los peronistas
• porqué una sociedad militarizada no puede acabar con el problema zombi
• los zombis en la literatura
• la película que Franchela no quiso filmar de muertos vivientes
• los locos que trasmiten virus, esos zombis refinados
• la relación zombi-sociedad de consumo
• los superhéroes zombis
• las sociedad de clases entre los zombis, la utopía arribada.

Buenas noches.

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